2024-07-20 11:36
1979
Recuerdo una vez, en un hotel de La ceiba, tenía como cinco años, y mire como Salvador Nasralla caía en la piscina por andar viendo unas muchachas en bikinis, justo en el momento en que en mi desayuno—un conflake de kelloggs con tres cucharadas de azúcar—caí del techo una araña patas flacas.
Desde entonces le tengo miedo al conflakes, soy socorrista de arañas y desconfío de los comentaristas deportivos.