2025-01-25 18:31
Comprendido entre lo real y lo imaginario,
una seña, un destello, un tono sin igual,
fruto de una mente hecha calvario,
ilustra al ser subyacente, al mortal.
Y así corrompen la pureza del que cree,
pues sueña en voz alta y se deja engañar,
por finuras propias del que no tiene fé,
por aquel que nunca supo dialogar.
Así acaban los prisioneros en vida,
los muertos tras apagadas pupilas,
los sueños hecho trizas sin cabida,
el mundo siendo una pieza en la partida.